Esta impresionante villa, terminada en el verano de 2024, es un refugio perfecto enclavado en la belleza natural de Formentera. Situada en la colina más alta de la isla, ofrece vistas panorámicas de Formentera y se orienta hacia el noroeste, proporcionando vistas espectaculares y siempre cambiantes del mar. Rodeada de árboles frondosos, sus terrazas ofrecen la opción de sol o sombra a lo largo del día, a medida que la luz del sol cambia.
La villa es el resultado de una transformación notable de una ruina olvidada en una zona natural altamente protegida. El proyecto, que tardó más de cinco años en completarse debido a las estrictas regulaciones, fusiona la simplicidad y el lujo de manera impecable. Diseñada para crear una atmósfera tranquila y serena, la casa presenta tonos naturales de blanco, complementados con ricos detalles en madera, acero y la piedra autóctona Marès de la isla.
Con un enfoque en la autenticidad y la calidez, el diseño abraza una elegancia discreta tanto en el interior como en el exterior. La propiedad es semi-sostenible, equipada con paneles solares y su propio depósito de agua, que utiliza agua desalinizada del mar que rodea la isla.
El Mirador de La Mola en Formentera ofrece unas vistas espectaculares de la isla y el mar Mediterráneo. Situado en la cima de la isla, rodeado de paisajes naturales y una vegetación exuberante, es el lugar perfecto para disfrutar de la tranquilidad y belleza de Formentera. Desde este punto privilegiado, se pueden admirar impresionantes panorámicas, haciendo de este mirador un destino imprescindible para quienes buscan conectarse con la naturaleza y disfrutar de la serenidad del entorno.